Tener amigos



Tener amigos desde niños,
a los seis, los doce,
los diez y ocho, o desde
el día en que has nacido
a la vida y la conciencia.
Es desarrollar la savia,
del árbol que en ti
ha crecido.
Desde tus raíces,
pasando por tu tronco
hasta las hojas , y
ya grande con tus flores
y los frutos.
Tener amigos, savia
que lleva, de ida al cielo
el agua y los nutrientes
que te hacen grande y sano
marcando tu destino.
Y de vuelta con el sol
su energía. Para recordar
tu origen de semilla,
saber quién eres
y de donde ha venido.
Tener amigos, que perduran
en el tiempo, primavera y
otoño de la vida.
Es no perderse en el camino.
Es saber volver a casa
aunque el mundo
hayas recorrido.
Y en el invierno de la vida
tener aún amigos,
es vivir bendecido
y ganarle la batalla,
al tiempo y al olvido.



JOSÉ CORRADO
17 DE Julio de 2020